HURACANES EN PAPEL™ - Reseñas literarias

Sólo me queda esperar la aparición de un Nuevo Tifón Literario de magnitud cinco como los producidos por Enrique Vila-Matas, Thomas Pynchon o Roberto Bolaño. Ese día llegará y mi búsqueda no habrá sido en vano. Huracanes en papel™ 2007-2024

miércoles, 22 de abril de 2009

La busca, de Pío Baroja

Esta novela me estaba esperando desde hace ya tiempo. Puede que dos años. Aguardaba en un lugar desconocido para mi desde el momento en que una persona muy leída compartió sus sensaciones sobre esta obra en un blog dedicado a la lectura. Su pasión por Baroja me salpicó, así que anoté la obra en mi Libreta Dorada.

Durante mi viaje a Trujillo, el pueblo natal de Pizarro, fui recorriendo diferentes pueblos y ciudades de Castilla y León , y Extremadura. Molinos de Duero (Sória), Zamora, Salamanca, Hervás (Cáceres), Badajoz, Mérida, Cáceres, Trujillo, Parque Nacional de Monfragüe, Cáparra, Valle de Ambroz, Valle del Jerte, Parque Natural de la Garganta de los Infiernos, Garganta la Olla, Monasterio de Yuste y Jaraiz de la Vera. Todo un descubrimiento de las maravillas que reposan ocultas aún para muchos en España.

Explorando esta Extremadura de Conquistadores en la que confluyen la Ruta de la Plata y la Ruta de Carlos V, mis pasos me llevaron a una curiosa librería dedicada a los libros antiguos, situada en el casco medieval y silencioso de Cáceres, en un perfecto ambiente de recogimiento. Un lugar donde sientes que el tiempo se ha detenido y todo permanece intacto. También los libros. Y allí, en ese secreto lugar de la literatura, abrí su Puerta de Cristal y las maderas crujieron a cada movimiento que mi cuerpo realizaba en la búsqueda y elección de una joya literaria para mi biblioteca interminable. De repente, todo un estante dedicado a Pío Baroja me inundó de placer y encontré varias ediciones antiguas de la trilogía Lucha por la vida. Comparé todas ellas y sin más dilación me hice con un ejemplar de 1972 de La busca, que tiene más años que yo, del editor Caro Raggio, marido de la hermana de Pío Baroja. Al abrir esta reliquia encontré las ilustraciones de su hermano Ricardo Baroja y un prólogo de Julio Caro Baroja, hijo del editor y sobrino de Pío Baroja. ¡Excepcional! Salí de la librería con sensación de riqueza literaria, portando en mis manos, la obra que mejor reflejaría en los albores del siglo XX el derrumbe y la decadencia de lo que un día fue el Imperio español.

La busca es un texto fundamental sobre la sociedad y las clases mas desfavorecidas de la España y del Madrid de comienzos de siglo XX. Su protagonista Manuel Alcázar llega a Madrid con diez años donde su madre, La Petra, viuda, está empleada como sirvienta de una casa de huéspedes. Manuel trabaja en varios lugares, como la zapatería del señor Ignacio o una tahona, mientras frecuenta la compañía de su primo Vidal y del "Bizco", que vagabundean por los barrios bajos de la ciudad ejerciendo de ladronzuelos y descuideros.

Leyendo La busca se aprende sobre todo en que consiste la lucha por subsistir, desde la visión hiperrealista de uno de los escritores más potentes de la literatura española, que puso su mirada en los arrabales y las clases bajas de Madrid, utilizando sus expresiones fonéticas y transcribiendo sus entonaciones. Su lectura te ayuda a desprenderte del materialismo sin sentido y a observar la parte más espiritual del ser humano.

Baroja, miembro de la Generación del 98, e influido por las filosofías irracionalistas de Nietzsche y Schopenhauer, dejó patente con sus agrias pinceladas existencialistas el panorama tan desolador de crisis, de incomodidad y desubicación que se respiraba frente al mundo excesivamente mecanizado y maquinista que había creado la Revolución industrial. Pesimista con el hombre y sensible con los marginados y hambrientos, mostró por los indefensos una notable ternura y fustigó sin piedad la crueldad de sus tiempos.

Cuando Pío Baroja murió, su ataúd fue llevado en hombros entre otros por dos de sus admiradores, Ernest Hemingway y Camilo José Cela, el uno era premio Nobel de literatura y el otro llegaría a serlo años más tarde. John Dos Passos también declaró su profunda admiración y su deuda con el escritor.

En nuestros albores del siglo XXI La busca me lleva a recordar irremediablemente a los 4.010.700 desempleados registrados en abril de 2009 en las oficinas del INEM y en cómo procederá su lucha por subsistir en un país que depende cada vez más de las subvenciones europeas y nacionales. Ayudarles a encontrar trabajo es el objetivo más urgente de todos a los que se enfrenta el país. ¡Ánimo! valientes.

No hay comentarios :