HURACANES EN PAPEL™ - Reseñas literarias

Sólo me queda esperar la aparición de un Nuevo Tifón Literario de magnitud cinco como los producidos por Enrique Vila-Matas, Thomas Pynchon o Roberto Bolaño. Ese día llegará y mi búsqueda no habrá sido en vano. Huracanes en papel™ 2007-2024

viernes, 3 de julio de 2009

Una isla sin mar, de César Silva Márquez

Martín sufre una ruptura sentimental con Eme, desde hace seis meses. Ella se ha marchado de su vida. Ahora él se cuestiona su existencia. Describe sus diversas relaciones con chicas del pasado y del presente. Evalúa la pérdida de sus amigos que abandonaron Ciudad Juárez, la ciudad caótica y fronteriza, por el orden y la pulcritud de los Estados Unidos. Y aquí, en esta isla sin mar, Martín se ve sacudido por sueños recurrentes en la noche, en los que visita los espacios de su antigua casa paterna, los espacios de su infancia, donde un viejo de barba blanca lo urge a marcharse a otros lugares, como una llamada a la superación. Estos emplazamientos que anhela desde muy temprana edad están influenciados por películas norteamericanas, como la mítica Cadena perpetua. Mazatlán será la ciudad que se termine convirtiendo en su esperado limbo, al igual que Zihuatanejo fue el paraíso de Andy Dufresne y Ellis Redding (El Rojo). Un escenario muy atractivo para la posible fuga.

Una isla sin mar posee el aroma del café veracruzano e irradia el calor de un cielo nítido y seco mexicano. Escrita a pulsos lentos nos agarra para que acompañemos a Martín por las orillas de su vida, en esa bóveda donde todo acaba o se inicia. Poco a poco y juntando trozos del espejo nos muestra la naturaleza de su inquietud por evadirse. Los recuerdos del pasado universitario, las aventuras amorosas de la juventud, el sexo impaciente, la prisa por vivir y una crisis automotriz del sector del automóvil juarense que hiere inevitablemente su instinto de ubicación, de permanencia o deserción.

“Y lejos, en el Océano Pacífico, la noche llega más tarde y su ola arrastra a los viajantes al sueño y oscurece las tortugas y los búhos, un final que se refleja en las aguas imitando sus movimientos.”

César Silva Márquez , escritor obcecado en los géneros híbridos, dueño del inglés y el castellano, plasma con acierto el entrelazado de dos territorios solapados, aunque con rabia. Avispas cosmopolitas y diversas, que reinciden en levantar sus nidos allí donde ya han sido aniquiladas zumban en su novela como metáfora de esa furia. Su literatura procede de los renglones de Jack Kerouac, Philip Roth, Paul Auster, Stephen King, Raymond Carver, Cormac McCarthy, Junot Diaz, Cesar Aira o Haruki Murakami, entre muchos otros. De todos absorve su Literatura de Altura, su gancho directo. Su narrativa es valiente y resuelta. Emite un mensaje con relieve que no te deja indiferente. Su obra está encaminada a llegar al celuloide. El tiempo lo dirá. De momento su lectura les aportará frescura e identidad. Disfruten.